El plazo para hacer la declaración de la renta está abierto desde el pasado 1 de abril y, un año más, se presenta la opción de marcar la “X Solidaria”. Se trata de un paso muy sencillo con una gran misión detrás, ya que este gesto permite destinar una parte de la recaudación a conceptos de carácter social. De hecho, en 2018 más de 300.000 personas se beneficiaron de los proyectos de COCEMFE (Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica) y sus entidades, entre las que se encuentra la Federación Española de Fibrosis Quística. Dichos proyectos se desarrollaron gracias al tramo estatal del 0,7% del IRPF. 

En este sentido, la asignación fiscal del IRPF permite a las personas contribuyentes elegir el destino de una pequeña parte de los impuestos que ya les han sido retenidos durante el año. En concreto, les permite destinar un 0,7% de su cuota íntegra del IRPF a “Actividades de Interés Social”, las cuales corresponden a la casilla 106. Señalando esta opción en la declaración de la renta, las personas contribuyentes ayudan a colectivos en situación de vulnerabilidad, siendo el objetivo de estas subvenciones la financiación de programas o proyectos de organizaciones sin ánimo de lucro y ONG.